El club alcalareño estuvo a solo dos puntos de proclamarse nuevamente campeón de 2ª Andaluza Femenina Sénior. Sin embargo, sí consiguió alzarse con la Copa Delegación de Sevilla.
La consecución del título de campeón de 2ª Andaluza Femenina Sénior y la posterior final de la fase de ascenso a Segunda División plantó al Ciudad Alcalá como uno de los equipos más atractivos de la provincia. Esto se reflejó en las incorporaciones que llegaron a Oromana durante el verano de 2016.
La primera novedad fue la de Cristina Benavides. La que fuera jugadora del Sevilla FC y del CD Híspalis se unió a la entidad panadera en calidad de segunda entrenadora. El cuerpo técnico terminó de reforzarse con Noelia Bocanegra (preparadora física) y más adelante se produjeron fichajes de peso en cuanto a jugadoras.
Para la segunda temporada se unieron al equipo celeste las futbolistas: Nora Ruiz (delantera que vino del CD Híspalis y con experiencia en el Betis), Bea Prieto (centrocampista que acabaría ejerciendo tiempo después de capitana), Marina Domínguez ‘Tibi’ (delantera experimentada), Eli Luque (hasta entonces defensa del CD Híspalis), Vicky Muñoz (defensa procedente del CD Montequinto), Koya (portera histórica del CD Híspalis), Sarah Mora (centrocampista que llegó del CD Híspalis) y Carmen García (anterior guardameta del Atlético libertad).
La eterna persecución
Si en la temporada 2015/2016 se había vivido una emocionante carrera de fondo entre el Ciudad Alcalá y el CD Honeyball Femenino, en la 2016/2017 aterrizó en el grupo sevillano de 2ª Andaluza Femenina Sénior un tercer competidor importante: el segundo equipo del Real Betis Balompié. Con la llegada del filial verdiblanco, las celestes comenzaron un intenso pulso futbolístico que se prolongó hasta la campaña siguiente, dejando por el camino unas ligas muy apretadas y disputadas, donde cualquier error, por mínimo que fuera, tendría un elevado coste.
En una liga con diez equipos, el destino hizo que el calendario del conjunto alcalareño comenzara con un plato fuerte tras otro. El debut tuvo lugar en Pino Montano, frente al Azahar CF. Fue un comienzo con buen pie, en el que Anabel inauguró el marcador, luego empató el combinado local y, finalmente, Saray Vela y Rosa cerraron el choque con un 1-3.
En la segunda jornada tocó medirse ante el CD Honeyball Femenino, que tan rocoso se había presentado unos meses atrás. Sin embargo, esta vez el marcador fue de 3-0 para el Ciudad Alcalá, con tantos de Nora, Saray Vela y San. El tercer encuentro fue contra el CD Híspalis, donde un gol de Mª Reyes trajo los tres puntos para Oromana.
A pesar de haber obtenido tres triunfos ante tres de sus rivales más directos, la entidad de Alcalá de Guadaíra no había conseguido situarse en lo más alto de la tabla clasificatoria. Precisamente, ese lugar pertenecía al Real Betis, que sería el próximo rival del club celeste. Se presentó en el Centro Deportivo Oromana un duelo igualado, en el que las béticas se adelantaron y ampliaron su ventaja hasta en un 0-2. Sin embargo, Sarah Mora y Tibi empataron para las anfitrionas. A pesar de ello, en el 78’, cuando el choque daba sus últimos suspiros, llegó el 2-3 definitivo a favor de las visitantes.
Aquella derrota fue la primera y la última que cosechó el Ciudad Alcalá en todo el campeonato, pero, a la larga, le acabó pasando factura. No obstante, las entrenadas por Álvaro González y Cristina Benavides se recompusieron en la siguiente cita, goleando al CD Estudiantes–Loreto por 0-9. A partir de ahí, la escuadra panadera venció por 8-0, 0-11, 0-6 y 8-1 en los siguientes partidos, hasta que volvió a medirse con el Azahar CF.
En esta ocasión, el duelo frente al conjunto de la capital tuvo un desenlace diferente al de la ida. El Ciudad Alcalá generó muchas ocasiones por mediación de San, Tibi y Dayi, que una y otra vez colaboraron en guiar el esférico hacia el área rival, pero, una vez ahí, los lanzamientos no acababan con el balón abrazando el interior de las mallas. Por si no fuera poca la frustración generada por llegar y no marcar, Tibi fue expulsada por protestar a pocos minutos del final, lo que dejó a la escuadra local con diez jugadoras.
El Azahar CF aprovechó la ventaja numérica y desempató en una de las escasas situaciones de peligro que pudo crear. Sin embargo, las celestes se volcaron en ataque y una falta ejecutada por Bea Prieto acabó en el 1-1 definitivo, gracias a que Dayi cazó el cuero y lo transformó en gol. Con este desliz, el Ciudad Alcalá se quedaba a cinco puntos del liderato.
En las siguientes citas, volvió a superar al CD Honeyball Femenino (0-2) y al CD Híspalis (3-0). Sin embargo, en paralelo, el Real Betis permanecía invicto y en lo más alto de la clasificación. En este contexto, las verdiblancas recibieron a las celestes para disputar la decimotercera jornada.
Un partido para recordar…
Real Betis Balompié – Ciudad Alcalá CF: La ansiada revancha
El Ciudad Alcalá Club de Fútbol pisó el césped de la Ciudad Deportiva Luis del Sol el 11 de febrero de 2017, sabiendo que aquella podría ser su última oportunidad de seguir aspirando seriamente a revalidar el título de campeón de liga. Si ganaba el Real Betis, las opciones de alcanzar el primer puesto de la tabla quedarían muy reducidas, pues la diferencia de puntos con las béticas sería de ocho y apenas quedaban cinco jornadas más por jugarse. Por el contrario, si vencían las celestes, serían solo dos puntos los que tendría de ventaja la escuadra heliopolitana sobre la panadera.
Llegó la hora de la verdad y el combinado local fue el primero en dar pasos adelante en el encuentro, en concreto, por la banda zurda. Sin embargo, por mucho que el esférico era guiado por las verdiblancas hacia la portería contraria, nunca acababa dentro, sino topándose con Koya. La guardameta fue una de las grandes protagonistas del choque, con actuaciones claves desde el comienzo hasta el final del partido. Una de sus primeras intervenciones destacadas fue en el 27’ ante Laura Moreno, al salvar un mano a mano estirando la pierna derecha para evitar el gol.
A partir de entonces, el Ciudad Alcalá reaccionó e hizo actuar a la portera bética, Sheila, que alzó la mano para impedir que Saray Vela marcara el primer tanto con un lanzamiento lejano. La posesión hasta el final de la primera mitad fue esencialmente celeste, gracias a las triangulaciones que se sucedían por el carril izquierdo. Sin embargo, el descanso llegó con un 0-0 en el marcador.
Cuatro minutos después de la reanudación, San tiró de maña y consiguió colar el cuero a la espalda de las defensoras béticas, alcanzando a Saray Vela que había entrado en el área. La delantera volvió a poner a prueba a Sheila, aunque esta vez a corta distancia y con una vaselina. Una obra maestra con forma de gol. Una vez alcanzado el 0-1, el Ciudad Alcalá optó por centrarse en defender y aprovechar los contraataques.
A pesar de ello, Koya tuvo que volver a mostrar sus habilidades como portera para mantener el resultado, esta vez despejando un chute que había mandado el esférico hacia la escuadra. No obstante, la última ocasión fue para el conjunto alcalareño, con Anabel rematando en el área pequeña tras recibir el balón desde un saque de esquina. La pelota fue frenada por una contraria y ahí acabó el choque.
El Ciudad Alcalá se había convertido en el primer club de la categoría en ser capaz de vencer al Real Betis y, además, en su propio campo y tomándose la revancha con respecto a la jornada de la ida. Ante todo, lo realmente importante era que ahora la separación entre ambos en la tabla era de dos puntos, lo que mantenía abiertas las puertas al equipo alcalareño para seguir luchando seriamente por el título de liga.
Real Betis Balompié: Sheila, Jessica, Cristina, Luisa, Bea (Samara, 59′), Eli (Sara Mayoral, 59′), Nerea (Amanda, 49′), Laura Moreno, Sonia, Sara (Laura Rivas, 67′) y Antía.
Ciudad Alcalá CF: Koya; Vicky, Eli, Dayi, Mª Reyes; Bea Prieto, Sarah Mora (Yulema, 77′); Tibi (Anabel, 77′), Cristina (Saira, 56′), San y Saray Vela (Rosa, 79′).
Goles: 0-1, Saray Vela (44′).
El final de liga del Ciudad Alcalá se resume en un diluvio de goles: 13-0 ante el CD Estudiantes-Loreto, 1-11 frente al Atlético Libertad, 7-0 con el CD Arahalense, 12-0 contra la UD Dos Hermanas y 0-6 en casa del CD Utrera. Con estos números, las celestes acabaron la competición como las más goleadoras, con 107 tantos a favor. Además, solo encajaron 7 dianas. Sin embargo, tanto esfuerzo no fue suficiente para volver a levantar el trofeo de campeonas de 2ª Andaluza Femenina Sénior, algo que esta campaña hizo el Real Betis. Las béticas sumaron 51 puntos, mientras que las del club panadero se quedaron en 49 puntos.
Una nueva aventura: La Copa Delegación
Con la liga finalizada, todavía quedaba un último evento futbolístico que abarcó desde el 23 de abril hasta el 11 de junio de 2017: la Copa Delegación de Sevilla. En dicho torneo participaron los mismos clubes que habían competido en el cuadro sevillano de 2ª Andaluza Femenina Sénior, a excepción del Real Betis Balompié.
Los participantes quedaron repartidos en dos grupos, uno con cuatro equipos y otro con cinco. El Ciudad Alcalá CF compitió en este último, junto al CD Arahalense, el CD Estudiantes-Loreto, el CD Utrera y la UD Dos Hermanas. Estos formaron el Grupo 1, mientras que en el Grupo 2 jugaron el Azahar CF, el CD Híspalis, el CD Honeyball Femenino y el Atlético Libertad.
En el Grupo 1 se siguió un formato de partido único, de manera que cada conjunto jugó dos encuentros como local y dos como visitante. Sin embargo, en el Grupo 2 hubo una ida y una vuelta. El equipo que más puntos sumara en la liguilla pasaría a disputar la final. Teniendo en cuenta los precedentes de la liga, el club alcalareño partía como el favorito de su grupo para acabar en la primera posición, pero debía demostrarlo, algo que hizo desde la primera jornada copera.
Las celestes iniciaron su andadura en este nuevo desafío el 29 de abril, acogiendo en Oromana al CD Estudiantes-Loreto. Aquella mañana llovieron goles junto al Guadaíra, con un resultado de 12-0 que comenzó a fraguarse desde el minuto dos y en el que Tibi y Saray Vela alcanzaron el hat-trick. Similar fue el choque de Arahal, en el que Nora hizo cuatro tantos del 1-7 definitivo. En la tercera jornada se vio más de lo mismo, 10-0 a costa de la UD Dos Hermanas, con Saray Vela anotando cuatro, aunque dejando sitio también para Nora, Tibi, Mª Ángeles y Vicky. El mismo marcador a favor se obtuvo en Utrera, con Saray Vela haciendo un triplete, una vez más.
De este modo, el Ciudad Alcalá pasó a la final como líder incontestable del Grupo 1. Por otro lado, en el Grupo 2, los resultados fueron más apretados. Aquí no había un favorito tan claro, ya que el CD Honeyball Femenino culminó la liga en tercera posición, el Azahar CF en cuarta y el CD Híspalis en quinta. Finalmente, fue el Azahar CF el que superó la ronda clasificatoria, con pleno de victorias y, al igual que el Ciudad Alcalá, con solo un gol encajado.
La temporada iba a cerrarse y con ella la opción de sumar un nuevo título para las vitrinas del club alcalareño, que todavía no contaba con los dos años de existencia. Por ello, el 11 de junio había quedado marcado en el calendario como un día especial, el día que habría de disputarse la final de la Copa de Delegación de Sevilla y, por si no fuera ya lo bastante ilusionante, iba a celebrarse en el Estadio Ciudad de Alcalá, el campo insignia de la ciudad y donde ejerce de local el CD Alcalá. Por tanto, la final se presentaba como una gran oportunidad en la que reunir a la ciudadanía alcalareña para que animara y disfrutara del club de fútbol femenino de su localidad en un día importante.
Como cabía esperar y pese a que la tarde se presentó calurosa, la afición respondió y acudió en masa al encuentro para aupar al equipo. El Ciudad Alcalá y el Azahar CF ya habían protagonizado choques de un intenso nivel futbolístico en la liga regular, por lo que se esperaba una final muy igualada. Y así fue.
En la primera mitad destacaron más las verdirrojas, que mantuvieron con mayor firmeza la posesión y estuvieron a punto de abrir la lata justo antes del descanso. Por su parte, las celestes apenas contaron con una ocasión tempranera de Mª Reyes y que ni siquiera fue entre los tres palos.
Durante la segunda parte, se pudo ver sobre el terreno de juego a un Ciudad Alcalá cada vez más centrado, posesivo y que generaba más llegadas. La balanza fue decantándose poco a poco a favor de la escuadra alcalareña, mientras que el conjunto de Pino Montano iba perdiendo fuerzas con el paso de los minutos. Pili, Tibi y Saray Vela dieron verticalidad al juego, pero siguieron sin ver puerta.
Se habían añadido cinco minutos de descuento y de ellos quedaba solo uno para que el duelo acabara con empate a cero. Había cierto olor a penaltis. Sin embargo, fue entonces cuando Nora logró transformar un pase entre líneas en una vaselina imposible de detener. Acababa de poner el 1-0 en el marcador, un gol que se celebró con mucha emoción en las gradas y en el propio césped. Unos instantes después se oyó el pitido final. El choque había acabado, lo que dio rienda suelta a las lágrimas, los besos y los abrazos. El Ciudad Alcalá, en su segunda temporada, había obtenido su segundo título, esta vez, la Copa Delegación de Sevilla.
